En Bella Unión funciona el Complejo Agroenergético - Alimentario, para la producción de bioetanol, azúcar, energía eléctrica y alimento animal.
ALUR comenzó a gestionar el 24 de enero de 2006 el ingenio azucarero de la cooperativa CALNU, a partir de un proyecto energético y alimentario que implicó un plan de inversiones industriales (optimización de la producción azucarera, nueva caldera, un turbogenerador para la generación de energía eléctrica y el montaje de una destilería para la producción de etanol); así como el diseño de la logística aplicada a la cosecha y la ampliación y modernización de los sistemas de riego.
Optimización de Producción Azucarera
Esta actividad tiene un alto impacto en la optimización del trabajo del ingenio azucarero, permitiendo bajar los costos de producción y mejorando la calidad del azúcar que produce.
En el año 2011 ALUR comenzó con la planificación de un nuevo proyecto que llevó implícito todo un cambio en la logística de recepción de la caña de azúcar. Esta reconversión tecnológica introdujo en el año 2013 la nueva mesa de 45º y la eliminación del patio de caña, para que el 100% de la caña de azúcar llegue a granel. Además se incorporó una nueva grúa de hilo, nuevas conductoras, nuevos desfibradores, la tolva y la colocación de la cuarta masa en el primer molino.
La introducción de esta nueva tecnología aporta condiciones de mayor seguridad para los trabajadores y permite optimizar en un 100% el uso de la caña de azúcar. Los resultados ya comenzaron a verse a través de una mayor extracción de jugo por cantidad de caña que ingresa a la industria y de menos vehículos más eficientemente aprovechados en el sistema.
Recientemente, en el año 2015, se pasó de un sistema de fardos de trabajo diurno a un sistema a granel de trabajo 24hs. Esto implicó cambios importantes en la gestión de los productores y prestadores de servicios. Fue un cambio apoyado y acompañado por la mayoría de los productores de caña.
También en el último año fueron importantes determinadas acciones que se realizaron en los sistemas de riego colectivo, particularmente en lo que respecta a sus costos y eficiencia de uso. Se efectuaron las primeras superficies de riego por mangas, las primeras experiencias de capacitación de productores y trabajadores vinculados al riego y la realización del proyecto de mejora de eficiencia.
Como resultado, se obtuvo una Zafra de caña de azúcar 2020 que cerró con números históricos, en un año marcado por la crisis sanitaria:
- Producción industrial de más de 20.000 toneladas de azúcar refinado, que permiten abastecer entre el 55 y el 60 % del mercado nacional.
- Producción de 23.000 metros cúbicos de bioetanol.
- Ingreso de más de 400.000 toneladas de caña de azúcar.
- Rendimiento excepcional de 63,4 toneladas por hectárea.
- Fuentes de empleo directo para más de 2.000 personas.
Eficiencia energética con la inversión de la Caldera
Esta inversión mejora la eficiencia energética de toda la cadena industrial azucarera, a través de la generación de vapor a partir del bagazo de caña, lo que no sólo permite abastecer los requerimientos energéticos de la planta, sino que también genera un importante excedente de energía para vender a UTE.
Cogeneración Eléctrica y venta de energía a UTE
El turbogenerador permite la producción de 12 megavatios de electricidad por hora para abastecer las necesidades de la Planta y para vender su excedente a UTE.
Destilería y producción de Bioetanol
En el año 2020 se alcanzaron los 23.000 metros cúbicos de bioetanol anhidro a partir de jugo y melaza de caña de azúcar.
El bioetanol es utilizado por ANCAP para mezclar con las naftas que se distribuyen en todo el país.
Fase Agrícola
Como parte del desarrollo de su plan de negocios, se creó el Fondo Agrícola con recursos propios para el financiamiento de la extensión de los cultivos, del cual también participa el BANDES.
En 2008 ALUR creó un Fideicomiso de garantía que tiene como objetivo el desarrollo de los sistemas de riego, la adquisición de maquinaria de cosecha y la conformación de un Fondo de asistencia y contingencia.
Al iniciar la gestión de ALUR en 2006, existían 2800 hectáreas de caña de azúcar en manos de 150 productores. Hoy ya se plantan más de 7.000 hectáreas para la caña de azúcar, en manos de pequeños y grandes productores.
En tareas asociadas a la fase agrícola industrial se generan fuentes de empleo directo para más de 2.000 personas.