La gremial que nuclea a la gran mayoría de los productores de caña de azúcar aceptó la propuesta de ALUR luego de extensas negociaciones que comenzaron el 3 de marzo.
Este contrato es inédito en la historia de ALUR tanto por su duración como en su contenido. Además, fue construido en base a la contribución de decenas de productores que se involucraron paulatinamente en la propuesta de la empresa y el apoyo paciente y perseverante de las autoridades locales y del departamento de Artigas.
Los cinco años de contrato brindan estabilidad y certeza a los productores y a los trabajadores de la caña y abandonan la innecesaria tradición de tensas negociaciones y conflictos en el inicio de cada zafra.
Por otra parte, el nuevo contrato introduce conceptos de eficiencia para generar incentivos económicos para los productores y ahorros para la empresa pactados de manera incremental a lo largo de la duración del contrato. Además, revisa aspectos que venían generando inequidades entre productores y asegura una más justa remuneración al productor responsable, comprometido y eficiente brindando certezas para los trabajadores zafrales y permanentes que, junto con sus familias y el comercio local, tienen en la caña de azúcar un sustento fundamental.
Este nuevo contrato permitirá alinear los esfuerzos productivos con el objetivo de seguir reduciendo el impacto del costo del etanol adicionado a la gasolina y contribuir con ello a la mejora en los costos de los combustibles en Uruguay.